La estrategia de implantación propone un Centro de Salud compacto, centralizado, que reduzca las pérdidas y ganancias energéticas con el exterior, al reducir la superficie de fachada, y optimizando además circulaciones internas, permitiendo siempre un recorrido intuitivo. 

Hacia su contexto urbano, la estratégica volumétrica propone una solución que dinamiza e innova su relación con el contexto urbano, mostrando un sistema de cubiertas inclinadas que se camufla con las zonas verdes que rodean al edificio, dando un aspecto más humano y cercano a la propuesta, al contar con un perfil reconocible y doméstico, que desplazan la idea de Centro de Salud como un centro institucional puro, e introduce una visión de Casa de los Cuidados, en el que los ciudadanos se sientan en un entorno que los acoge y protege como una segunda Casa. 

Este sistema de cubiertas, permite sistematizar los volúmenes que organizan el programa funcional, dando lugar a bandas (o alas) programáticamente diferenciadas, con el objetivo de optimizar los flujos de movimiento en cada una de las áreas que definen el edificio. 

Los dos grandes patios con que cuenta la propuesta, generan dos espacios de referencia interiores, apostando por un Centro de Salud con espacios de calidad, agradables, luminosos, humanos, vegetales… que hacen que la estancia en la sala de espera sea amena, donde pueda disfrutarse de las flores, las plantas, vistas del cielo, sol en invierno, brisa en verano, y espacios amplios y seguros, más volcados hacia el exterior que hacia el interior, eliminando imágenes claustrofóbicas más propias de edificios donde apenas se aprecia el paso del día por su uso intensivo de luz artificial.